




Situada junto al conocido Barrio Alto, encontramos una antigua cantera de explotación caliza y bosque adulto que sobrevive entre plantaciones de eucalipto. Se encuentra rodeada por un bello encinar que destaca por su alto valor ecológico. Se trata de un bosque mixto con arbolado de gran porte, que ha conseguido sobrevivir en un territorio en el que el desarrollo de las plantaciones con eucalipto ha proliferado rápidamente. A pesar de esto, se pueden observar especies como el laurel o el madroño, típicamente asociadas al encinar. Constituye un hábitat que favorece de forma intrínseca el incremento de la biodiversidad.
La cantera consta de un mirador semicircular o terraza en la ladera este, desde la que se puede apreciar en su totalidad la conocida mies de Escobedo. Se puede acceder a esta terraza, creada por la propia actividad extractiva de la mina, a través de una senda con escalones de piedra, protegida por un balaustre de madera que a su vez la bordea. Dicha senda permite también subir hasta la encina llamada "La Pedraja", encina centenaria de gran porte que atrae todas las miradas por si sola.
Esta antigua cantera ha sido transformada y acondicionada para la realización de actividades turísticas, deportivas (escalada, rappel), educacionales (aulas al aire libre), culturales y recreativas (gimkanas, juegos, zona de descanso). El lugar consigue aunar tranquilidad y actividad en el mismo espacio.